PREVENCIÓN CONTRA EL DENGUE
¿Qué se sabe acerca de la vacuna?
Diciembre 2023
El Dengue es una enfermedad viral transmitida por mosquitos de la familia Aedes que al estar contaminados diseminan el cuadro por medio de las picaduras a humanos.
Se conocen 4 tipos distintos de agentes virales que originan la enfermedad. Los mismos se denominan DEN1, DEN2, DEN3 y DEN4. La importancia de ello es que, si bien la persona afectada genera inmunidad contra futuras reinfecciones, la misma sólo estará dirigida al serotipo viral responsable del cuadro. Esto significa que, a pesar de haber sufrido Dengue podrá volver a enfermarse si cualquiera de las otras 3 clases de virus involucrados lo infectan nuevamente.
No hay transmisión de persona a persona ni por intermedio de objetos contaminados. Tampoco a través de la leche materna.
El Dengue está distribuido por todo el mundo, siendo más frecuente en climas tropicales y subtropicales.
En nuestro país existe circulación autóctona del virus, es decir las infecciones no se originan por viajeros o migrantes que llegan al país con la enfermedad, sino que es la circulación viral y del mosquito en nuestro medio lo que la hace posible. Esto sucede especialmente en las provincias del Centro, (Buenos Aires, CABA, Córdoba, Santa Fé, Entre Ríos) y las regiones del Noroeste, noreste y Cuyo.
La mayoría de las personas que contraen dengue presentan síntomas leves o incluso ninguno y se curan en una o dos semanas, es decir es una enfermedad benigna y autolimitada. Pero en ocasiones la enfermedad se agrava requiriendo hospitalización y algunas veces causando la muerte.
Cuando los síntomas aparecen lo suelen hacer entre 4 y 10 días después de la picadura. Suelen ser fiebre alta, dolor de cabeza, dolor retro ocular, náuseas, vómitos y malestar general.
Hay factores que pueden predisponer a presentar signos y síntomas graves. Una de ellas es la reinfección por un serotipo distinto al o a los anteriores cuadros. También cuando la enfermedad se establece en personas con deficiencias en la inmunidad, patologías crónicas, en personas mayores, en menores de 5 años y en embarazadas.
La prevención sigue siendo la medida más importante para el control de la enfermedad, combatiendo los potenciales criaderos de mosquitos como los envases o elementos que puedan albergar agua en el interior de las casas y alrededores. Del mismo modo el uso de mosquiteros y repelentes a fin de evitar las picaduras.
Hay una buena noticia. Desde noviembre se comenzó a comercializar una vacuna contra el Dengue, habiendo sido autorizada por la ANMAT a partir de los 4 años de edad.
Es una vacuna desarrollada a partir de virus atenuados y la inmunización consiste en dos dosis separadas por un intervalo de 3 meses. Promueve defensas contra los 4 serotipos del virus.
No previene la enfermedad en el cien por ciento de los casos, sino que el beneficio radicaría en evitar las formas graves de la misma. Está contraindicada durante el embarazo, personas con disminución de las defensas, en tratamiento con quimioterapia o con altas dosis de corticoides.
La experiencia acumulada en otros países indica que es bien tolerada y los efectos adversos son poco frecuentes y comunes a otras vacunas.
Sin embargo, aún no está definida en nuestro país su indicación en la población general.
Si bien está autorizada como dijimos por la ANMAT, la misma no integra aún el calendario oficial de vacunas, por lo que queda a criterio del profesional su indicación y del mismo paciente la adquisición de las dos dosis necesarias que en principio poseen un alto costo.
Estaría indicada en aquellas personas que ya enfermaron de Dengue, encontrándose en riesgo de contraer nuevamente la enfermedad por otro serotipo que, como se dijo anteriormente, favorecería la aparición de signos y síntomas graves.
La probable evolución de los contagios durante los meses de calor y humedad que se avecinan posiblemente motiven la indicación y reglamentación de la misma por las autoridades sanitarias.
Fuente: Ministerio de Salud Pública de la Nación. 2023