Hepatitis

por | 30 mayo, 2022

HEPATITIS DE ORIGEN DESCONOCIDO

¿Qué se sabe hasta ahora?hepatitis2

Junio 2022

Se denomina hepatitis a la inflamación del hígado Dicho fenómeno pude obedecer a distintos orígenes. Los más frecuentes y conocidos son originados por virus. Solemos referirnos a la hepatitis A, la B y la C, pero además existen una gran variedad de agentes virales que también pueden producir la enfermedad.

Sin embargo, existen hepatitis producidas por otros microorganismos, por mecanismos autoinmunes, (anticuerpos propios contra el mismo hígado), tóxicos, medicamentos, etc.

El hígado es un órgano indispensable para la vida. Es un verdadero laboratorio donde se sintetizan una gran cantidad de sustancias y se metabolizan antes de su eliminación otro gran número de elementos. La mayoría de los medicamentos requieren pasar por el hígado antes de ser eliminados por los riñones.

hepatitis6

Es un gran reservorio de energía por intermedio del almacenamiento de glucosa y hierro, necesario para la producción de glóbulos rojos, participando también en la producción de factores de coagulación sanguínea. A nivel digestivo produce sales biliares que pasan a la vesícula para su posterior secreción en el intestino delgado.

Toda hepatitis produce una alteración más o menos significativa de esas funciones en relación al agente agresor y al estado previo de la persona involucrada. Cuando la mayor parte del funcionamiento del hígado cesa casi por completo nos encontramos frente a una insuficiencia hepática y si la misma se desarrolla en muy corto tiempo se habla de una insuficiencia “fulminante”. Dicho cuadro posee una gravedad tal que el mantenimiento de la vida sólo suele ser posible mediante un trasplante del órgano.

hepatitis4

La hepatitis A supo ser la infección hepática más frecuente, especialmente en niños y adolescentes. Transmitida especialmente por vía oral y materia fecal provoca generalmente dolor sobre el lado derecho del abdomen por el agrandamiento del hígado, náuseas, vómitos, algunas veces fiebre y un color amarillo característico sobre piel y mucosas, denominada ictericia, secundaria a la acumulación de bilirrubina que no puede ser metabolizado en forma total por el órgano. La mayoría de los niños afectados por esta enfermedad curan sin presentar secuelas. Sin embargo, un número importante de ellos pueden desarrollar al inicio del cuadro una hepatitis denominada “fulminante” en relación a la insuficiencia hepática que generalmente se convierte en irreversible.

hepatitis1

Antes de la aparición de la vacuna contra la hepatitis A no era infrecuente la necesidad de trasplantes hepáticos de urgencia secundarios a esta enfermedad. Con la inclusión de dicha vacuna en el calendario oficial al año de edad la enfermedad ha disminuido en forma notable y con ella la necesidad de trasplantes por dicho motivo.

Sin embargo, otras hepatitis pueden afectar al hígado y algunas veces llevarlo a su insuficiencia. Hay infinidad de virus que pueden provocar cuadros similares al descripto, sin tener predilección especial por el órgano, pero afectándolo de igual manera. Del mismo modo, y como se dijo anteriormente, algunas veces son los tóxicos, las drogas o las mismas defensas del organismo las que pueden actuar produciendo las hepatitis. Sin embargo, en algunas oportunidades no se logra encontrar el origen de la afección.

hepatitis7

El 15 de abril de 2022 la Organización Mundial de la Salud, emitió una alerta en relación a la aparición de un brote de hepatitis aguda de etiología desconocida en el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte en niños pequeños previamente sanos en general. Desde entonces se han notificado casos en distintas partes del mundo, incluso en nuestro país, requiriendo en muchos de ellos trasplantes y en otros produciendo lamentablemente muertes.

La enfermedad ha sido descripta como una hepatitis aguda grave, con importante ictericia, acompañado en la mayoría de los casos por síntomas gastrointestinales previos que incluyen dolor abdominal, diarrea y vómitos. La mayoría de los casos no tenían fiebre.

Lo curioso de estos casos de hepatitis es que en ninguno de ellos se pudo aislar virus específicos de la enfermedad, (no A, no B, no C) como tampoco tóxicos, drogas o mecanismos autoinmunes que pudieran explicarla. Sin embargo, y en forma característica, todos los casos poseían la presencia de un virus, (adenovirus). Los adenovirus, son patógenos comunes en humanos y tienen capacidad para causar enfermedades en las vías respiratorias, los ojos, el intestino, el hígado y el tracto urinario.

hepatitis3

Si bien, el mencionado virus, como vemos, puede provocar afección hepática, a la fecha no se explica completamente la frecuencia ni la gravedad de los casos reportados en todo el mundo. Factores como una mayor susceptibilidad entre los niños pequeños después de un nivel más bajo de circulación de adenovirus durante la pandemia de COVID-19, la posible aparición de un nuevo adenovirus, así como la coinfección con el Covid 19 se están investigando a la fecha. Las hipótesis relacionadas con los efectos secundarios de las vacunas contra la COVID-19 actualmente no se respaldan, ya que la gran mayoría de los niños afectados no habían recibido la vacuna contra el mismo. Por lo tanto, no se encuentra relación con la mencionada inmunización.

La investigación de este fenómeno continúa su curso en centros especializados y probablemente en un plazo prudencial se pueda encontrar una respuesta.

hepatitis5

Mientras tanto es importante estar atentos ante la aparición de cuadros similares a los comentados y realizar una rápida consulta.

Se recuerda que dentro de las causas más frecuentes de hepatitis virale en pediatría se encuentran la hepatitis A y hepatitis B que son dos enfermedades inmunoprevenibles. Ambas vacunas se encuentran incluidas en el Calendario Nacional de Vacunación con los siguientes esquemas:

Hepatitis A: una dosis aplicada a los 12 meses de vida

Hepatitis B: tres dosis a los 0, 2,4 y 6 meses de edad, combinada con otras vacunas.

El descenso global registrado sobre las coberturas de vacunación en el transcurso del año 2020 es preocupante en Argentina como en el resto del mundo, estrechamente relacionado con el desarrollo de la pandemia Covid 19. Dicho descenso probablemente haya afectado también a la vacunación contra ambas hepatitis dejando en riesgo de enfermedad a numerosos niños.

Por lo tanto, tratemos que la aparición de estos casos inusuales de hepatitis o como de cualquier otra patología infecciosa haga controlar más de cerca el carnet de vacunas, asegurando la protección frente a todo lo que se pueda prevenir.

Fuente: Subcomisión de Epidemiología y Comité Nacional de Hepatología. Sociedad Argentina de Pediatría 2022

Seguí también a La Carta del Doctor enlogo-facebook

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *